La disreflexia autonómica es una afección médica poco frecuente, pero grave, que puede manifestarse en personas con una lesión en la médula espinal. Obtenga más información sobre los signos y síntomas de advertencia de esta afección.
Las personas con lesiones de la médula espinal son propensas a padecer disreflexia autonómica, según la ubicación y la gravedad de la lesión. Esta afección puede provocar situaciones de urgencia médica, como accidentes cerebrovasculares, convulsiones o paros cardíacos.
Puede ocurrir cuando hay un reflejo hiperactivo en el sistema nervioso autónomo (que es el centro de mando de funciones clave como la respiración y la digestión) por alguna causa que se encuentra por debajo del punto dañado en la columna vertebral. Es una reacción desproporcionada del organismo que puede desembocar en una situación peligrosa si no se resuelve con rapidez.
Si bien no es tan frecuente como otros problemas médicos posteriores a una lesión de la médula espinal, es fundamental que usted y sus cuidadores comprendan en qué consiste la disreflexia autonómica y cuáles son los signos de advertencia, sobre todo si la lesión está ubicada en la zona de la vértebra T6 o más arriba. Si usted y el equipo están atentos a los síntomas indicativos de esta afección, sabrán qué hacer para resolverla con rapidez.
Síntomas frecuentes de la disreflexia autonómica
Al principio, los signos más habituales de esta afección grave son sutiles. Entre ellos, se encuentran una sensación de sofoco y un dolor de cabeza intenso. Otros signos de advertencia más insignificantes son la sudoración abundante, la congestión nasal o los escalofríos (sin fiebre).
Otros síntomas pueden ser los siguientes:
· frecuencia cardíaca lenta
· visión borrosa
· respiración dificultosa
· espasticidad muscular
· retención fecal
· piel de gallina
· manchas en la piel
· piel fría y húmeda por debajo de la lesión
También puede presentar signos de advertencia mentales que imitan la respuesta del cuerpo ante el estrés. Algunos de ellos son la sensación de ansiedad, miedo o agitación. Es posible que también se sienta confundido/a.
Cualquiera de estos síntomas de disreflexia autonómica puede aparecer de forma repentina. Es fundamental estar alerta, prestar mucha atención a lo que ocurre en el cuerpo y tomar medidas rápidas.
Controle la presión arterial
Como puede ver, algunos síntomas de la disreflexia autonómica pueden asemejarse a otras afecciones médicas comunes y más leves, como un resfriado o una alergia, o incluso el resultado de un día estresante. Eso forma parte del peligro inherente de la disreflexia autonómica, los signos de advertencia que podrían indicarle a su cuidador/a que se trata de una situación poco amenazante cuando, en realidad, tanto usted como su equipo deben actuar rápidamente ante una afección médica potencialmente mortal.
Una de las claves para distinguir los verdaderos signos de alerta de otra cosa es controlar la presión arterial. Debido a que la disreflexia autónoma provoca un aumento significativo de la presión arterial, es importante tener un tensiómetro a mano para usted y las personas que lo/a ayudan.
Estas son algunas pautas generales para la lectura de la presión arterial:
· Si la lesión en la médula espinal se encuentra por encima de la vértebra T6, la tensión arterial sistólica normal suele estar entre 90 y 110 mm Hg.
· Una medición de 20‑40 mm Hg por encima de los valores de referencia puede ser un signo de disreflexia autonómica.
· En el caso de los adolescentes, una medición de 15‑20 mm Hg por encima de los valores de referencia representa un síntoma.
· En el caso de los niños, una medición de 15 mm Hg por encima de los valores de referencia es un indicio de disreflexia autonómica.
Cuándo buscar atención médica
Supongamos que la presión arterial es más alta de lo normal y además tiene algunos de los síntomas anteriores. En ese caso, tendrá que buscar la causa de su disreflexia autonómica y resolverla con rapidez, si es posible. Es posible que la solución sea algo tan sencillo como aflojar una prenda ajustada o eliminar los pliegues de un catéter obstruido. Siga controlando la presión arterial cada 5 minutos.
Las causas más graves que justifican que acuda al servicio de Urgencias pueden ser fracturas o fisuras óseas o cualquier otro traumatismo que pueda ser la causa del problema. Si usted o el equipo no pueden identificar la causa, busque atención médica de inmediato.
Referencias:
